El Chaltén tiene como fecha de fundación el 12 de octubre de 1985, siendo así el pueblo más joven de Argentina. Está cercado por el curso de los ríos de las Vueltas y Fitz Roy, al pie de los macizos del Cerro Chaltén o Fitz Roy y Torre.
Chaltén es el nombre con que los tehuelches (aborígenes de la región) denominaban al cerro cuyo significado es “montaña que humea” y que, tiempo después, Perito Moreno bautizara como Fitz Roy.
El aislamiento es una de las características de este extremo norte del Parque Nacional Los Glaciares. En El Chaltén todavía no hay una red de telefonía domiciliaria satisfactoria, los teléfonos móbiles no funcionan y el acceso a Internet es pobre y muy caro. Como contrapartida esta misma condición es uno de sus valores.
La mayoría de los visitantes que llegan lo hacen atraídos por un desafío: practicar alpinismo, trekking o caminatas en alguna de las imponentes agujas graníticas que rodean a la villa.
Nosotros llegamos con la idea de hacer un trekking de 3 días y 2 noches acampando en la montaña y así conocer tanto el cerro torre como el Fitz Roy, es decir, queríamos ir a lo grande, ya que nuestro paso por Torres del Paine nos hacía vernos como auténticos alpinistas.
Desgraciadamente, tuvimos un mal tiempo increíble ya que el otoño había empezado con fuerza y los guarda parques decidieron cerrar las rutas que íbamos a recorrer. Ante tal calamidad, decidimos hacer un par de caminatas cortas para quitarnos un poco el mono de andar y disfrutar de los placeres de la vida copa de Malbec en mano.